En NegociaYa hemos hablado en varias ocasiones del relevo generacional de negocios como una vía fundamental para mantener la actividad, favorecer la continuidad de emprendimientos locales y evitar el cierre de negocios rurales que representan valor social en sus municipios.
En este marco, hoy nos acompaña Laura López, de Relevo Rural, un proyecto que trabaja en Andalucía, Extremadura y Castilla-La Mancha con un enfoque rural puro.
A continuación, le hacemos unas preguntas para conocer mejor su propuesta, su visión del negocio rural y cómo afrontan el relevo generacional.
Para empezar, ¿Qué entendéis vosotros por “negocio rural”?
Cuando hablamos de “negocio rural” no nos referimos a una simple tienda o bar, para nosotros un negocio rural es un proyecto que ayuda y da vida a que los pueblos sigan activos, como la panadería de toda la vida donde desde generaciones trabajan para ofrecer ese producto a sus vecinos, o la farmacia
donde tu vecina ayuda en que la salud de las personas mayores del municipio no se vea empeorada por falta de medicamentos y cuidados básico.
Los negocios rurales dan identidad a su territorio, y la diferencia con lo urbano está en el vínculo: en los pueblos, un negocio no es anónimo, es parte de todos los vecinos.
¿En qué consiste exactamente el “relevo generacional de negocios rurales”?
El relevo generacional es dar continuidad a los negocios cuando sus dueños se jubilan o deciden parar su actividad. En el medio rural es aún más relevante, porque si un bar, una frutería o una gasolinera cierran, no solo se pierde una actividad económica: se pierde un servicio esencial, un punto de encuentro, un pedazo de vida en el pueblo. El gran reto es conectar a quienes quieren dejar su negocio con personas que sueñan con emprender en lo rural, acompañándoles en todo ese proceso.
¿Cómo nació Relevo Rural y cuál es la historia detrás del proyecto?
Relevo Rural nació al darnos cuenta del problema de que muchos pueblos se quedaban sin servicios básicos al cerrar sus negocios por la falta de población joven. En Andalucía, Extremadura o Castilla-La Mancha la situación era clara: había emprendedores con ilusión por vivir en lo rural, pero no sabían por dónde empezar, y negocios con futuro que corrían el riesgo de desaparecer.
De esa necesidad surgió el proyecto, impulsado por un equipo diverso que comparte una misma misión: mantener vivos los pueblos.
Detrás de Relevo Rural hay cuatro entidades que trabajan juntas y aportan su experiencia complementaria:
- Rural Bridge, experta en asistencia técnica para entidades e instituciones rurales, que contribuye diseñando y desarrollando proyectos de innovación rural. Su papel es fundamental para obtener financiación y asegurar que las ideas se conviertan en proyectos reales y sostenibles que transformen la vida en los pueblos.
- Como una Cabra, una escuela de negocios creada por y para mujeres, que impulsa el emprendimiento femenino en el medio rural con formación, acompañamiento y proyectos con impacto positivo. Su labor es clave para que más mujeres encuentren en los pueblos una oportunidad real de desarrollo personal y profesional.
- Realízate, una consultora de dinamización rural con sede en Carbajo (Cáceres), especializada en acompañar proyectos rurales desde la participación y la colaboración, siempre con una mirada puesta en el impacto real en el territorio. Además, aporta su gran experiencia en la evaluación de Fondos Europeos, lo que asegura que cada iniciativa se mida y se gestione con eficacia y eficiencia.
- Rural Citizen, una asociación que promueve la reactivación territorial a través de la inteligencia colectiva y la innovación social. Su visión sistémica ayuda a conectar personas y crear ecosistemas colaborativos donde surgen nuevas narrativas y soluciones sostenibles frente al reto demográfico.
¿Qué servicios ofrecéis hoy en día a emprendedores y negocios rurales?
Ofrecemos un acompañamiento completo que combina formación especializada en emprendimiento y economía circular, sesiones grupales y networking, e inmersiones en el territorio para conocer de primera mano el ecosistema rural y los negocios. Además, facilitamos mentorías personalizadas y aplicamos metodologías innovadoras como el Aprendizaje Basado en Problemas y el Place-Based Learning para asegurar la viabilidad y el éxito de cada relevo.
En cuanto a la viabilidad económica, ¿Cómo ayudáis a que un negocio rural que cambia de manos sea sostenible a largo plazo?
Aseguramos la viabilidad con un diagnóstico 360º, plan de negocio y plan de transición (100 días), más un cuadro de mando mensual y mentoría en territorio para ajustar precios, costes y procesos.
Las ayudas reducen CAPEX/OPEX (eficiencia, digitalización), el plan de negocio guía decisiones y anticipa caja, y los microcréditos cubren circulante del primer año.
- Secuenciamos: plan sólido → ayudas compatibles → financiación flexible → ejecución con KPIs.
- Resultado: negocio sostenible, rentable y arraigado al municipio.
¿Cómo seleccionáis tanto los negocios que necesitan relevo como las personas candidatas?
Hacemos una escucha activa en el territorio, hablando con alcaldes, asociaciones y vecinos para identificar negocios que buscan relevo, y también a través de plataformas digitales. El “match” surge cuando vemos que hay afinidad: no se trata solo de comprar un negocio, sino de integrarse en un municipio y darle continuidad a un negocio tradicional.
¿Encontráis sinergias o puntos de colaboración con portales de compraventa y traspaso de negocios como NegociaYa.com?
Totalmente, plataformas como NegociaYa nos ayudan a encontrar negocios que buscan traspaso o relevo generacional. Además, son plataformas complementarias a nuestro objetivo: mientras nosotros acercamos negocios y emprendedores, estos portales facilitan el contacto y la visibilidad del traspaso de negocios.
¿Qué resultados habéis conseguido hasta ahora?
Aún es pronto para dar resultados ya que el proyecto se encuentra en periodo de ejecución, pero, podemos adelantar que actualmente hemos contactado con 15 negocios de diferentes zonas y sectores que tienen esta necesidad, y nos encontramos en el momento de encontrar personas activas y emprendedoras que quieran conocer estos negocios y coger su testigo.
¿Cuáles son las principales barreras o dificultades que os encontráis al trabajar en zonas rurales?
Una barrera importante es la comunicación, estas zonas rurales, y más por su tipo de población más envejecida y menos habituada a plataformas digitales, es más difícil encontrarlos y ponerse en contacto con ellos.
Desde vuestra experiencia, ¿Qué sectores o tipos de negocios rurales tienen más futuro?
Sectores ligados a la alimentación local, al turismo de naturaleza y cultural, a la atención de mayores y a los oficios tradicionales reinventados. También vemos futuro en proyectos agroecológicos, en el aprovechamiento de energías renovables y en todo lo que tenga que ver con la digitalización aplicada al
mundo rural. La tendencia es clara: cada vez más gente busca autenticidad, y eso los pueblos lo tienen de sobra.
Mirando al futuro, ¿Qué planes tenéis para Relevo Rural?
Próximos pasos: consolidar el modelo en Andalucía-Extremadura-CLM y escalar a nuevas CCAA mediante alianzas con GDR, diputaciones y redes sectoriales.
Metodología: reforzar el enfoque place-based con itinerarios sectoriales, mentoring entre pares y cuadros de mando de impacto (ventas, empleo, servicios).
Innovación: plataforma de matching con portales de traspaso, microcredenciales formativas y pilotos de financiación combinada (ayudas +microcrédito) para acelerar cada relevo.
Queremos agradecer a Laura y a todo el equipo de Relevo Rural por compartir su experiencia y su visión sobre el futuro del relevo generacional de negocios rurales en España. Su trabajo demuestra que existen alternativas reales para dar continuidad a negocios en municipios pequeños, evitando el cierre de proyectos que son esenciales para la vida en los pueblos y generando nuevas oportunidades para emprendedores.